Dermatitis Atópica
Esta enfermedad se produce porque hay un defecto en la barrera cutánea, la cual está desestructurada. Esta desestructuración favorece la penetración de agentes externos identificados como posibles desencadenantes del brote en la dermatitis atópica. Estos brotes provocan picor, costras y descamación en la piel. Además, es una enfermedad hereditaria, pues se ha observado que si uno de los padres tiene la piel atópica hay posibilidades de que el bebé también la tenga.
Cuando se genera el brote, los dermatólogos suelen prescribir una crema con corticoide adecuada a cada caso y productos de hidratación emolientes para mantener la hidratación cutánea y evitar las recaídas.
Algunos consejos a seguir para personas con esta enfermedad son:
- Utilizar ropa de algodón para facilitar la transpiración de la piel y evitar productos durante el lavado de la misma que sea irritantes.
- No permanecer en ambientes secos, ni utilizar alfombras ni objetos que puedan tener una alta concentración de polvo.
- En cuanto a la higiene, utilizar geles específicos y muy hidratantes. Además, que la temperatura del agua sea templada para evitar la irritación cutánea.
- Utilizar lociones emolientes para hidratar al bebé después del baño. Esto evitaría la posible aparición de brotes.
- Mantener las uñas cortas para evitar lesiones en la piel.